La artillería de la libertad.

"... debates con un claro perfil de sabotaje lingüístico".

Podemos definir el concepto informar como la acción de dar informes, noticias; siendo otra acepción posible la de formar, perfeccionar a alguno por medio de la instrucción.

Este es nuestro punto de partida en esta nueva entrada en la que planteo como todavía podemos encontrar fuentes de información que aportan un plus de objetividad y veracidad en un maremágnum de noticias, informaciones o boletines que nos saturan con el sello de la actualidad desde diferentes medios de comunicación oficialistas y generalistas.

Muchos de estos formatos informativos de los principales canales de radio y televisión son un calco unos de otros, planteándose como una verdadera quimera conseguir desde esta simetría del convencionalismo ese “perfeccionamiento por medio de la instrucción”.

No obstante, a poco que uno intenta bucear entre tertulias descafeinadas, debates incendiarios o mesas redondas de mente cuadrada, se pueden encontrar en el panorama mediático algunos rayos de originalidad que nos pueden iluminar en la oscuridad cegadora de unos mensajes informativos que no aportan nada novedoso, fabricando noticias que no soportarían en muchos casos el menor análisis crítico.

Los medios tienen que ser el escalón hacia el conocimiento, siendo precisamente eso, medios, no fines, debiendo acompañar al lector, al oyente, al televidente o al internauta en el camino de formación de sus ideas, no imponiendole pensamientos con el sello de lo veraz y con un tratamiento de la información que dista mucho de aquella máxima de Arthur Miller según la cual un periódico, y por extensión un medio de comunicación, es una nación hablándose así misma.

Uno de los hallazgos informativos de los últimos tiempos ha sido para mí el programa “Fort Apache”, o como ellos mismos se definen, la tertulia política de resistencia, presentado por el profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid, Pablo Iglesias, en el canal HispanTV.

Un programa donde, los tertulianos, con un alto nivel formativo en diferentes campos del saber, analizan distintos temas de actualidad yendo más allá de la frase demagógica, del populismo rancio, del comentario provocador o del humor casposo.

Otro elemento interesante es que cada interviniente escucha y deja hablar a los otros, algo que no por ser evidente deja de ser novedoso ya que a lo que nos tienen acostumbrados es a debates donde el ganador es aquel que no deja exponer sus ideas al “contrario” utilizando una artillería dialéctica con claro perfil de sabotaje lingüístico.

Decía Oscar Wilde que la diferencia entre periodismo y literatura es que el periodismo es ilegible y la literatura no es leída, precisamente eso es lo que hace de Fort Apache un programa diferente y esencial, busca informar y formar al receptor, nada más y nada menos.

Este programa va de la mano de otra mesa de debate que estos días ha llegado a su emisión número 100, su nombre “La Tuerka”, emitiéndose desde el Canal 33 Madrid Tele K.

Acertada reflexión, cuando Pablo Iglesias comenta que no hay inteligencia sin humor, y que cualquier tertulia que pretenda ser inteligente debería asumir el humor, me sirve esta frase para conectar con el último hallazgo por ahora dentro de este rompecabezas que es informarse, aprender y mantener una mínima autonomía y libertad de pensamiento.

Me refiero a “Polonia” del Canal TV3, un programa de sátira política dirigido por Toni Soler, en el que se trata con humor el panorama político catalán y español, haciéndonos ver cómo con una sonrisa burlona se pueden decir verdades contundentes.

Fort Apache, La Tuerka y Polonia son las tres sugerencias que desde aquí planteo en este entrada del blog para que vosotros mismos saquéis vuestras propias conclusiones que es de lo que se trata, ya lo decía Hans-Dietrich Genscher “la prensa, los medios de comunicación, son la artillería de la libertad”, pues ahí tenéis tres buenos obuses de información.

La corrección de lo políticamente incorrecto.

"...cuando en el mundo aparece un verdadero genio... todos los necios se conjuran contra él".

Profundicemos en la expresión "políticamente correcto": en sentido amplio, "referido a la afiliación con la ortodoxia política o cultural", siendo su contrario lo "políticamente incorrecto" es decir, "aquello que podría causar ofensa o ser rechazado por la ortodoxia política o cultural de un determinado grupo". 

Partiendo de estas premisas pongo hoy sobre la mesa el colapso que sufrimos continuamente de poses, actitudes, posturas, comentarios, reflexiones, pensamientos e imágenes que se considerarían "políticamente correctas", incluyendo igualmente en este grupo a individuos, corporaciones, sociedades y colectivos que hacen todo lo posible para no quedar desmarcados de la foto fija de lo ortodoxo.

Lo que debe decirse, lo que debe hacerse o lo que debe pensarse surge de estas posturas inmovilistas con una ficticia naturalidad, dice John kennedy Toole en  "La Conjura de los necios" que cuando en el mundo aparece un verdadero genio, puede identificársele por este signo: todos los necios se conjuran contra él. 

Un personaje que muchos considerarían políticamente incorrecto, el genial Grouxo Marx, decía que "el secreto de la vida es la honestidad y el juego limpio, si puedes simular eso lo has conseguido". ¡Ahí esta la clave!... simular, aparentar, parecer o disfrazar, con tal de quedar bien y evitar el qué dirán, deporte nacional por otra parte.

En este camino de propuestas que es este blog, como primer receso en esta entrada antes de continuar reflexionando, os planteo la música de un artista políticamente incorrecto, Rosendo, guitarrista, cantante y compositor, componente de los míticos Ñu y Leñó, siguió su carrera en solitario, recordando la reciente gira en 2011 "Otra noche sin dormir" con Barricada y Aurora Beltrán, ex cantante de Tahúres Zurdos. 
Este pasado mes de octubre Rosendo ha sacado un nuevo disco con el irreverente y políticamente incorrecto título de "Verguenza Torera". Escuchando y leyendo la letra de la canción que pone título al disco uno no puede sino asentir y callar (muy recomendable el vídeoclip oficial).

A lo musical añadimos ahora lo visual, lo artístico, pero igualmente desde la atalaya de lo políticamente incorrecto, en este caso de la mano de un artista genuino que impacta con sus obras y que descabalga a los que quieren seguir montando el caballo de la ortodoxia. 
Su pseudónimo es Banksy, artista del street art británico, siendo su trabajo un alegato contundente de obras satíricas sobre política, cultura pop, moralidad o etnias, combinando escritura con graffiti y estarcidos con plantilla (stencils). Su arte nos recuerda al mítico, e igualmente políticamente incorrecto Blek le Rat, que comenzó a trabajar con estarcidos en París, apareciendo los trabajos de Banksy en diferentes ciudades del mundo, especialmente en Londres.

No sorprende que este artista guarde celosamente su identidad real a los medios de comunicación, buscando con sus acciones de arte urbano callejero promover visiones distintas de la realidad que nos aparece en dichos medios... simplemente ¡Genial!:

Y apostando por lo políticamente incorrecto, finalizo esta entrada con un vídeo de un grupo conquense de hip hop que realiza una ácida crítica a esos medios perseguidores de la identidad de Banksy y a tantos otros abanderados de lo políticamente incorrecto que tanto molestan a los maniquíes de la sonrisa arcaica... ellos son "Nacho", "Palo", "Kike" y DJ "Gunfunk", que nos hacen ver la "Necesidad Impuesta" que representa lo políticamente correcto en una sociedad donde como sentenció Oscar Wilde "el hombre es menos sincero cuando habla en su nombre. Dadle una máscara y os dirá la verdad".