Los clásicos como referente para entender el presente...
Queda ya muy poco para que comience el Festival de Teatro Clásico de Almagro, al cual me unen muchas vivencias personales y profesionales... desde esta Atalaya os recomiendo hoy que os metáis en la página web del festival y que analicéis la programación de este año...
Una vez más los clásicos nos harán reír, llorar, reflexionar o pensar... y sobre todo nos harán ver que hay temas que trascienden los tiempos, que su análisis perspicaz y lúcido de su realidad histórica se puede trasladar a nuestros días... de bufones, de nobles simplones, de reyezuelos, de sirvientes cómplices, de héroes atormentados, de pioneros masacrados, de verdades y mentiras, de apariencias y realidades... en definitiva de nuestra realidad actual.
Por lo tanto hoy, más que nunca, reivindicar desde aquí a los clásicos como reporteros de una realidad que no ha cambiado... haciendo de los actuales "personajes" de esta tragicomedia nacional unos pobres y mediocres aprendices de muchos y maestrillos de nada...
Incluso el slogan de este año "el color de los clásicos" es un alegato a lo virtual del teatro frente a lo "gris" de muchos personajes que nos toca soportar con esos aires de grandeza... aunque a través del caleidoscopio de las tablas se les ve pequeños y ridículos... y además sin gracia.
Señoras, Señores, la función va a comenzar, guardemos silencio y pensemos... seguramente después del festival veremos quienes son los malos actores y quienes los grandes interpretes... no del festival sino de la vida real... aunque en ocasiones es muy difícil distinguir.