Editorialblog.

De listillos, aprovechados... y alguno que pasaba por allí.

Recortes, recortes y más recortes... perdón, el léxico oficialista propagandístico y poseedor de la razón absoluta habla de "explorar" y "reorganizar", y es que uno de los aspectos de la situación actual que está pasando más desapercibido es el lenguaje que los políticos aplican a sus discursos de cartón piedra a la hora de vender a los ciudadanos que todo va mejor de lo que pensamos, tratándonos como si fuéramos una sociedad menor de edad que necesita del paternalismo protector de "papá Estado".

Equipos de profesionales elaboran a diario las consignas de partido que a primera hora de la mañana reciben todos los diputados, senadores, alcaldes, concejales y alguno otro "paseante de villa y corte" que en ese momento pasa por ahí.
¿Y qué significa esto? que ese día ante cualquier cámara de TV o micrófono se repetirá ese consigna de partido como un mantra, llegando en ocasiones al esperpento...

A esos políticos, que son nuestro representantes, aunque ellos se sienten nuestros "Gobernantes", les recomendaría que no nos tomen el pelo, que somos una sociedad mayor de edad intelectualmente, que no necesitamos salvadores de la patria con horario de partido de la selección, pero que luego plantean una "Amnistía Fiscal" travestida de "Regularización fiscal"... una vez más la prostitución léxica y la demagogia barata como cortinas de humo para no llamar a las cosas por su nombre.

Sería bueno que nuestros representantes políticos nos hablaran de manera clara y directa, que no necesitaran la consigna y el slogan diario para sobrevivir a una pregunta "inoportuna" de un periodista... y es que ¿cómo se les ocurre a los periodistas preguntar a los políticos? lo ideal sería, bajo el punto de vista de estos curiosos personajes con corbata, que se publicaran y difundieran las mismas consignas que ellos reciben, sin el filtro de la imparcialidad, sin contrastar la información, buscando únicamente el rédito político y el ataque descarnado al enemigo político...

Y al final de todo esto, los ciudadanos, víctimas de la demagogia y del simplismo de unos políticos a los cuales les vendría bien algo muy simple, pero muy complicado para ciertas mentes.... que leyeran, que se cultivaran, que repasaran el diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, y que se dieran cuenta que los ciudadanos lo entendemos todo, aunque nos lo cuenten a través de una pantalla de plasma, por cierto lo último en declaraciones oficiales de presidentes que dan la cara en países con una contrastada madurez democrática... 
Y de regalo, la imagen de El Roto, que plasma muy bien el gran enemigo de estos personajes, la Cultura, los libros, todo aquello que sirva para traducir su lenguaje de Torre de Babel con el que nos quieren llevar a su huerto, un huerto árido y pedregoso...

Quo plus habent, eu plus cupiunt