domingo, 24 de junio de 2018

ATMÓSFERA SOFOCANTE DE MALDAD.

Cada vez son más las noticias que nos llegan a través de diferentes plataformas y formatos comentando la maldad y la barbarie que muchas personas ejercen contra los animales. En numerosas entradas de este blog he planteado mi mayor repulsa y desprecio hacia estos actos delictivos que muestran la cara más horrorosa y nefasta de nuestra sociedad.


El SEPRONA ejerce tiene que enfrentarse a diario a la realidad del maltrato contra los animales

Los psicópatas asesinos que maltratan y asesinan a animales son seres sin ningún tipo de empatía ni sensibilidad que no dudarían en cometer las mismas tropelías contra cualquier hombre, mujer o niño que se encontraran en su comino. Es más, seguramente si se investigara a esto maltratadores de animales no sería sorprendente encontrar conexiones con delitos como maltrato en el ámbito familiar, amenazas, incluso abusos, violaciones o asesinatos.


Las leyes deberían endurecerse y aplicarse con celeridad y contundencia



Estudios científicos han demostrado que muchos de los sujetos que han cometido graves delitos contra la sociedad mostraron sadismo y violencia contra animales en su infancia o juventud, siendo un rasgo distintivo indeleble. Otro aspecto que me enerva es la indiferencia, la apatía y la falta de compromiso de las autoridades con respecto a este tipo de delitos de maltrato animal. Ellos son los representantes de los ciudadanos y somos muchos los que ya no soportamos más estas barbaries diarias contra los animales de compañía o de granja.


Las "personas" que este verano abandonarán a perros y gatos se les debe definir  como delincuentes



La ineficacia, pasividad y falta de diligencia de los poderes públicos para actuar de manera contundente y enérgica contra los maltratadores y asesinos de animales es consecuencia del reflejo de una sociedad donde la indiferencia, cuando no la complicidad, se han convertido en los rasgos distintivos de personas que incluso alientan o ven como "normal" lo que en una sociedad plenamente desarrollada y moderna se atajaría desde el minuto uno.


Esta imagen muestra la gran labor que desarrollan los animales en nuestra sociedad

Pero analizando las "fiestas populares" de muchos lugares se entiende como seguimos anclados el atraso y la cerrazón del maltrato animal, los defensores de este tipo de acciones ponen vitolas de "cultura" a lo que no pasa de ser un comportamiento anacrónico en el siglo XXI, demostrando una ira y violencia verbal contra todos aquellos que ejercemos un derecho constitucional y cívico como es dar su opinión desde la discrepancia si, pero también desde el respeto.


Sin más, el Roto.



Se apropian además de otros elementos distintivos que hacen "suyos" mostrando cuan profundos son los prejuicios y las posturas retrógradas de personas que necesitaría menos testosterona y más lectura. Sirva este post de desahogo ante la sofocante atmósfera de maltrato, abandono y violencia hacia los animales, aunque no sirva de nada, aunque sea un grito en el desierto, aunque genere indiferencia cuando no risas socarronas, pero sirva también para mostrar que hay personas que nos duele, que nos preocupa esta situación injustificable de maltrato y abandono.


Las viñetas de Paco Catalán son dardos a la conciencia colectiva de esta sociedad



Comprar productos que no hayan sido experimentados previamente con animales y ejercer nuestros derechos como consumidores que quieren un desarrollo sostenible respetando nuestro entorno más allá de las campañas publicitarias de algunas empresas que buscan simplemente un efecto de maquillaje para tapar su falta de compromiso real con esta propuestas ecologistas son algunas actuaciones individuales que pueden cambiar algo la situación actual.


Marcas como Lush ofrecen productos de una altísima calidad que no han sido testados en animales


Finalmente tampoco debemos olvidar nuestro carácter de ciudadanos que pueden ejercer su derecho a voto eligiendo a representantes que incluyan, y lo que es más importante, que cumplan medidas reales contra el maltrato y la violencia animal; el tiempo lo dirá.




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